¿Cuán a menudo piensas: “Si hubiese…”?.
“Si hubiese escogido de forma diferente, mi vida habría sido mejor.
De haber conocido lo que sé hoy, esto no habría sucedido”.
Este modo de pensar fomenta la culpa y el remordimiento, cuando de hecho, no podías elegir de otra manera o saber lo que conoces hoy y todo sucede exactamente como tiene que ser.
Nuestras experiencias, sin importar lo dolorosas que sean, han sido creadas para ayudarnos a evolucionar y llevarnos al siguiente nivel de conciencia.
Desde el punto de vista de la crianza, si sientes culpa o remordimiento sobre tu manera de ser madre, por ejemplo: cómo diste a luz, si amamantaste o no, si disciplinaste a tus hijos severamente o fuiste flexible, si tuviste poca comunicación, si sientes que controlas en exceso o te avergüenzas de algo, pero: ¿Qué pasaría si miraras todo esto, aceptas lo mucho que has avanzado y reconoces que este viaje ha sido único y que no podría haber sucedido de otra manera?
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