Todos tenemos una voz suave y susurrante que nos guía por el mejor camino. Esta inteligencia vital siempre está presente con nosotros, velando por nuestros mejores intereses: en SFK, decimos que es nuestra Voz Verdadera.
El desafío está en aprender a escucharla, identificar su forma única de expresarse y confiar en su guía.
Cuando traemos esta conciencia a nuestro hogar, cambia por completo el sistema nervioso y la calidad de las relaciones.